Las competencias transversales, que benefician el desempeño independientemente de la actividad o profesión, se vuelven cada vez más esenciales en el mercado laboral y la sociedad. Las instituciones de educación superior (IES) enfrentan el desafío de incorporar estas competencias en sus programas de estudio de manera efectiva. Pero, ¿cómo pueden las IES lograrlo y medir el progreso de sus estudiantes? Aquí te presentamos algunas estrategias clave:

1. Establecer un Marco Común de Competencias Transversales

Definir un marco común de competencias transversales que oriente el diseño curricular de los programas. Asegurase de que este marco esté alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. Este marco debe ser flexible y adaptable a los diferentes contextos y necesidades de cada programa.

2. Integrar Competencias Transversales en el Diseño Curricular

Incorporar las competencias transversales en los resultados de aprendizaje esperados de cada asignatura o módulo, así como en los criterios de evaluación. Los docentes deben diseñar actividades que fomenten el desarrollo y la evidencia de estas competencias en los estudiantes.

3. Emplear Metodologías Activas

Utilizar metodologías activas y participativas, como el aprendizaje basado en problemas, proyectos, casos, y simulaciones. Estos enfoques permiten a los estudiantes aplicar sus conocimientos y habilidades en situaciones reales o relacionadas con su futura carrera.

4. Fomentar el Trabajo Colaborativo

Fomentar el trabajo colaborativo entre los estudiantes, así como la interacción con otros actores relevantes del entorno académico y profesional. Esto implica crear espacios de diálogo, debate, feedback y coevaluación que enriquezcan el proceso de aprendizaje.

5. Aprovechar la Tecnología

Emplear herramientas digitales que faciliten el acceso a recursos actualizados y la comunicación entre estudiantes y docentes. Las modalidades en línea o híbridas pueden ampliar el alcance y la calidad de la educación superior.

6. Evaluar Competencias Transversales

Utilizar instrumentos válidos y confiables, como portafolios, autoinformes, pruebas situacionales y observaciones directas, para evaluar las competencias transversales en diferentes contextos y situaciones.

7. Proporcionar Retroalimentación Continua

Ofrecer retroalimentación continua y formativa a los estudiantes sobre su desarrollo de competencias transversales, así como orientaciones para su mejora. Los docentes deben guiar a los estudiantes en su proceso de aprendizaje.

Estas estrategias son un punto de partida para incorporar y medir competencias transversales en la educación superior. Cada institución puede adaptarlas a su contexto y necesidades específicas. Lo crucial es que las competencias transversales sean consideradas como elementos esenciales en la formación integral de los profesionales del siglo XXI, no como aspectos complementarios o secundarios.